Tanto si tienes una casa en propiedad como si estás de alquiler, la necesidad de tener un seguro de hogar debe ser considerada, para evitar tener que afrontar ciertos gastos en el momento en que ocurra un accidente.
Aunque en España tener un seguro de hogar no es obligatorio, a menos que el inmueble esté hipotecado, la mayoría de los hogares contrata este tipo de seguro para estar tranquilos de que estarán cubiertos frente a cualquier avería o desperfecto que pueda ocurrir en el inmueble.
Tipos de seguro de hogar
Existen diferentes tipos de pólizas de seguro de hogar, según los riesgos que se cubren, y aunque existen diferentes modalidades en función del tipo de vivienda o de las necesidades concretas, básicamente, hay tres tipos de seguro:
- Póliza de daños: esta es la póliza más básica y normalmente es la que se contrata en el caso de solicitar una hipoteca, ya que se recomienda contar una póliza de daños mientras haya un préstamo hipotecario.
- Póliza multirriesgo: está póliza es la que cubre lo que se denomina el continente, que es la estructura de la vivienda y el contenido que son todos aquellos objetos y enseres, incluido mobiliario y bienes dentro de la vivienda. En esta póliza multirriesgo también está incluida la cobertura por responsabilidad civil, es decir, cualquier daño causado a un tercero y tiene una serie de coberturas básicas como las siguientes: cobertura por incendio, por fenómenos atmosféricos, daños por agua, daños eléctricos, daños estéticos, entre otras
- Póliza de amortización de préstamo: básicamente un seguro de vida, que también está vinculado al préstamo hipotecario o personal. No es obligatoria su contratación, pero siempre es recomendable para estar cubiertos ante cualquier situación imprevista. Se trata de una póliza bastante básica, creada con el fin de garantizar un capital en caso de fallecimiento o invalidez permanente.
Pautas para elegir el seguro de hogar
Para poder elegir correctamente el seguro de hogar que mejor se adapte a características y necesidades que tenemos en la vivienda, además consultar con un profesional que nos brinde asesoría, hay que tener en cuenta ciertos aspectos:
Realizar una óptima valoración tanto del continente como del contenido
Con el propósito de no caer en el infraseguro, es decir, que el valor del capital asegurado sea menor que el valor de reposición, y por lo tanto, en caso de accidentes o averías no se cubran los daños al completo.
Elegir las coberturas correctamente
Hay que comprobar cuáles son las coberturas básicas en el contrato del seguro, que cubren los daños más usuales, y también adaptar aquellas coberturas adicionales según las particularidades de nuestro hogar.
Comprobar las indemnizaciones
Aunque hay muchas pólizas que realizan pago de indemnizaciones, buscando compensar cualquier avería o accidente en el hogar, debes saber que hay pólizas que no realizan indemnizaciones ‘a nuevo’, esto significa el valor de la depreciación sufrida por los objetos durante los años que han estado asegurados, serán descontado, siendo un pago menor.
Verificar el periodo de carencia y exclusiones
Hay compañías aseguradoras que imponen un periodo de carencia, eso quiere decir que, durante un cierto tiempo, la póliza no será efectiva y por lo tanto, no cubrirá cualquier daño que se produzca durante ese lapso. Asimismo, hay que tener claridad en todas las exclusiones que aparecen en la póliza de seguros.
Para poder elegir el seguro adecuado a nuestra situación, es muy importante revisar toda la oferta existente y comparar tanto los precios como las coberturas que brindan las diferentes compañías aseguradoras para poder elegir el seguro más apropiado para nuestro hogar.
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