Tanto si te decides a vender un inmueble por tu cuenta, como si cuentas con una agencia inmobiliaria, hay ciertos pasos que hay que seguir para completar el proceso y conseguir el objetivo final de venta.

En Gesvar Global te dejamos esta guía básica para poder vender un inmueble.

Ponle precio a tu vivienda

Es uno de los puntos fundamentales para poner a la venta un inmueble y que se consiga el objetivo, pero el precio de venta de una vivienda depende de muchos factores, como por ejemplo: la ubicación, el estado del inmueble, sus características específicas, y por supuesto, la oferta y la demanda. Si no queremos equivocarnos y poner un precio muy por encima o muy por debajo, que no consiga atraer a los compradores, tendremos que realizar una valoración objetiva, teniendo en cuenta el mercado.

Prepara el inmueble antes de venderlo

Junto con el precio, la imagen que demos de nuestro inmueble, es un factor determinante para poder conseguir una venta rápida. Por muy buen estado que tenga o  aunque sea nuevo, siempre hay que realizar ciertos cambios y mejoras a la vista de los futuros interesados. Si no tienes claro cómo puedes preparar tu vivienda para la venta, siempre puedes acudir a alguna empresa especializada de Home Staging, que sea capaz de sacar los puntos fuertes de tu vivienda y ayudarte a dar una muy buena primera impresión y llegar a un mayor número de interesados para multiplicar las posibilidades de venta.

Recopila toda la documentación necesaria

Dentro del proceso de venta de un inmueble, es fundamental contar con toda la documentación necesaria para que el proceso no se vea paralizado en el último momento. Para ello, habrá que recopilar documentos que incluyan: escritura de compraventa del inmueble que vamos a vender, el certificado de eficiencia energética, todos los documentos que confirmen que en inmueble está libre de cargas, como por ejemplo, el último recibo de IBI y las últimas facturas de los suministros abonadas, así como el certificado de estar al corriente con las deudas de la comunidad. en determinados casos habrá que aportar la cédula de habitabilidad y el certificado de Inspección Técnica de Edificios, en el caso de que sea un inmueble más antiguo.

Publicita y dale visibilidad al inmueble

Con el precio fijado y el inmueble listo para vender, es el momento de realizar un reportaje fotográfico de calidad donde se puedan destacar los puntos fuertes de la vivienda. Lo más recomendable es contratar los servicios de algún profesional e incluso plantearnos la idea de realizar un tour virtual para llegar a un mayor número de clientes. Hecho esto, es el momento de incluir nuestro inmueble en los diferentes portales inmobiliarios, con el objetivo de llegar al mayor número de interesados posible. Hay que prestar especial atención a que el anuncio contenga información detallada y precisa, incluyendo los planos, y que sea veraz y esté actualizada.

Mantente disponible para las consultas y las visitas

En el momento en que tengas publicitado tu vivienda, tendrás que estar lo más disponible posible, tanto para atender las llamadas como para gestionar las visitas para no perder ninguna oportunidad de venta. Es importante que tengas en cuenta que una vez que encuentres algún comprador interesado, también tendrás que negociar el precio de venta y una vez que hayas llegado a un acuerdo, habrá que formalizar todo el proceso.

No obstante, si acudes a una agencia inmobiliaria, no solo vas a tener asesoramiento personalizado durante todo el proceso sino que ellos van a encargarse de realizar todos estos pasos de una manera rápida y eficaz. Con la ayuda de un agente inmobiliario experto, podrás ponerle un precio adecuado a la vivienda, ya que ellos conocen al mercado y además pueden realizar valoraciones objetivas de un inmueble. Nos ayudarán a gestionar y tramitar toda la documentación necesaria. La agencia inmobiliaria realizará un plan de marketing personalizado para darle la mayor difusión y publicidad a nuestro inmueble y además se van a encargar de filtrar a los interesados, gestionando todas las llamadas y las visitas para que nosotros no tengamos que preocuparnos por nada.